Después de la ruptura

Todos los escritos a continuación son de mi autoría.

Quizá la tarde lluviosa en la que nos mojamos mientras caminábamos, hubiera sabido mejor si probábamos ese vino. Tal vez, habríamos entrado más rápido en calor ya que aún no nos tocábamos.

No debimos planear un viaje, sólo teníamos que irnos y ya. Quizá así la maleta se hubiera llenado de más recuerdos y no de excusas.

Que iría contigo hasta el infinito te dije, pero yo no hice ningún viaje. Me quedé en nuestro nido esperando a que regresaras. Pero habías emprendido ya tu vuelo a los brazos de alguien más. Vaya tonta debiste pensar, porque me habías dado ya el boleto y no lo quise usar.

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Secreto

Lo convertí en mi escudo, en el pasaje de salvación de la pesadilla a la que llamaba mi vida. Creí que él podía salvarme cual caballero y llevarme lejos. Al menos a la página que dice 'FIN' en el cuento, pero no; no resultó así.

Aunque lo apreciaba, jamás dejé de lado la idea de que él podía ser una pieza imprescindible en mi escapatoria, él tenía tanto que yo quería.

Lo usé como boleto a mi felicidad, a un tipo nuevo de libertad. Lo usé como mi nuevo refugio, como mi nueva familia y aún así logró deshacerse de mi sin saber de mi plan. No tenía la mínima idea de lo que yo en verdad quería y pretendía a su lado.

Fuimos

Los días eran más dulces, como un pedacito de piña en el desayuno. Sabías a sol que calentaba incluso en el día más lluvioso.

Quería despertar contigo todos los días de mi vida, sentir tus brazos fuertes sujetándome contra tu cálido pecho. Estaba dispuesta a ver sin cansancio tu sonrisa y tus dientes brillantes con cada carcajada que compartiéramos.

Deseaba sentir el aroma de tu perfume y el olor de tu ropa limpia cuando estabas cerca, me hubiera gustado quedarme más el último día. Tal vez unos minutos más habrían hecho la diferencia y justo ahora no tendría la necesidad de usar el pretérito.

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No me enamoré de ti. Sólo me enamoré de una pequeña parte. En todo el tiempo que estuvimos juntos, no te conocí por completo.

Por qué tuviste que ser bueno conmigo? Dime. Por qué no me enseñaste ese lado oscuro de ti?

No debiste ser alegría todos los días, pudiste ser tormenta de vez en cuando; quizá así tu luz no me habría cegado. Ojalá hubieras sido más honesto para ahorrarme el sufrimiento. Ojalá y me hubieras dicho adiós en lugar de pedir disculpas cuando mi corazón ya estaba roto.

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No Regresaremos

Me tomé el tiempo de pensar en profundidad, pensar en mi, en ti, en nosotros; en lo que fuimos y lo que no será más.

Después de tanto tiempo en que he añorado tu regreso, y he sentido tanto cariño por tu recuerdo, llegué a la conclusión de que no regresaremos.

Por fin entendí que ya no te necesito, que te amo y que te amaré siempre pero ya no te quiero en mi vida. Ya no hay razón para creer que fuiste mío cuando jamás fue así.

Ahora te veo tan feliz y no hago otra cosa que pedirle al universo que no te arrebate esa felicidad.

No te guardo rencor, no te odio, jamás lo haría.

He arrancado tu nombre de mi tablero de deseos, ahora tengo espacio para más.